La pintora Martha Diamond, reconocida por su expresionismo al retratar diversos aspectos de Nueva York, falleció a los 79 años tras una larga enfermedad. Sus obras capturaban la ciudad desde múltiples perspectivas, enfocándose en temas como rascacielos, andamios y reflejos de edificios en ventanas vidriosas. Aunque su enfoque aparentaba simplicidad, críticos elogiaron su habilidad oculta y decisiones artísticas complejas.
Diamond, considerada una “visionaria de Nueva York”, pintó la ciudad a través de su lente expresionista, desafiando la representación naturalista. Su enfoque singular a menudo se subestimaba, pero críticos, como Roberta Smith del New York Times, elogiaron su técnica y humor. La artista falleció poco antes de que una exposición de 60 obras suyas se inaugurara en el Colby Museum of Art en Maine, programada para julio de este año y organizada por el Aldrich Contemporary Art Museum.
Nacida en 1944 en Nueva York, Diamond dedicó casi toda su carrera a la ciudad. Aunque se sumergió en la pintura del Expresionismo Abstracto y estudió influencias fundamentales, como Jackson Pollock y la pintura china, afirmó no ser conscientemente influenciada por otros artistas. Aunque su reputación nunca igualó a la de sus contemporáneos de los años 80, como lo demuestra su participación en una sola Bienal del Whitney en 1989, continuó experimentando y creando obras que capturaban la esencia de la ciudad.